Estilo barroco en la oficina

Un ejemplo de cómo el estilo barroco también funciona en el trabajo.

Sí. Como lees. Es posible llevar un estilo más recargado al trabajo. El estilo barroco es susceptible de entrar en la oficina si lo llevas con actitud. Aunque soy muy fan de estilos relajados, lo cierto es que no renuncio en ocasiones a arriesgar y probar estampados y piezas que puedan ayudarme a conseguir un punto diferente dentro de mi estilo.

Llevaba tiempo detrás de una chaqueta negra, de estilo militar que me fascina y me enamoré de la que ves, de corte torera. La llevo con un vestido cóctel, con un estampado geométrico que está de moda y bolso tipo limosnera que compré hace un par de veranos. Para terminar, unos preciosos guantes y mis botines negros. ¿Qué te parece el resultado?