Dinh Van: una marca de joyas sencillas, ideales para la vida cotidiana.
Desde que leí la review que le hizo Inés de la Fressange en su Guía de Estilo, La Parisina, tenía muchas ganas de acercarme a conocer la marca de joyas preferidas por las parisinas más refinadas. ¿Y qué mejor momento que ahora cuando se cumple el 50 aniversario de su lanzamiento?
Llevaba tiempo buscando una marca de joyas que pudiera recomendar para WorkingOutfits. Dinh Van me ha conquistado por muchos motivos. En primer lugar porque sus joyas son sencillas y fáciles de llevar. Joyas para la vida cotidiana, para todos los días. Si algo valoro en una marca es su versatilidad y que me permita utilizarla en diferentes situaciones de mi vida, tanto personal como profesional. ¿No te parece una pena tener piezas preciosas guardadas eternamente en un joyero? Prefiero invertir en una joya que sé de antemano que voy a poder llevar indistintamente a un evento familiar importante o a una reunión de trabajo. ¡Una joya para todos los días de la vida!
El leitmotiv de Dinh Van desde su nacimiento ha sido bajar la joya a la calle. Son, por tanto, joyas ideales para llevar al trabajo, como ya te enseñaba en este business outfit.
Otro aspecto que me ha gustado mucho de esta marca francesa de joyas ha sido su concepto de “joyas para compartir”, en lugar de “joyas para heredar”. Joyas que podrás compartir con tu madre o con tu hermana porque son joyas que aunque no ceden a las idas y venidas de la moda, se inscriben en una perfecta modernidad.
Tienen varias colecciones. Personalmente me gusta especialmente su colección Menottes, con uno de los símbolos emblemáticos de la casa, las esposas abrazadas que sirven además de cierre, muy seguro a prueba de pérdidas. Después de lucirlas, te das cuenta que nunca vas a encontrar nada más refinado ni exquisito que una joya Dinh Van y que el verdadero lujo está en la simplicidad.
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